Prácticos
¿Debo desactivar la cámara web cuando no esté en uso?
El espionaje remoto a través de la cámara web es un asunto conocido desde hace más de una década y no son pocos los usuarios y/o profesionales que han decidido desactivarla, a pesar de su utilidad al proporcionarnos comunicación de vídeo, audio y otras funciones. Más aún desde que la pandemia del COVID-19 nos confinó en casa y aumentamos el uso de las aplicaciones de videoconferencia.
Las técnicas utilizadas y los objetivos de los ciberataques a través de la la cámara web han sido muy diversos, desde el espionaje gubernamental; la instalación de malware con herramientas como Gumfish; el aprovechamiento de vulnerabilidades como la de Flash Player para tomar el control de máquinas; como forma de extorsionar a famosos; para “pilladas” a usuarias/os en paños menores o simplemente como placer para esos “mirones” que pululan por Internet invadiendo la privacidad del prójimo.
Si todo lo anterior era lo suficientemente grave para tomar medidas, la imagen de una cinta adhesiva cubriendo la webcam del ordenador del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, fue lo suficientemente descriptiva. La recomendación del director del FBI durante una conferencia en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, cuando aseguró que tapar la webcam cuando no esté en uso es una de las “acciones prudentes que debería realizar cualquier usuario”, volvió a provocar una gran cantidad de debate sobre la seguridad de las cámaras web personales.
Cómo desactivar la cámara web
Es difícil valorar hasta donde llega el riesgo del uso de las webcam, pero si no la utilizas frecuentemente, tampoco hay razón para dejar un dispositivo de grabación potencialmente inseguro permanentemente accesible y / o activo en tu equipo, accediendo a tu empresa u hogar.
Te recordamos métodos efectivos para deshabilitar la cámara web cuando no está en uso, pero al tiempo reversibles para otros momentos que necesites utilizarla.
Desenchufa. Tan simple como eso. El 99 por ciento de los usuarios de PCs de escritorio utiliza una webcam externa colocada generalmente encima del monitor. Desenchufar el conector USB es un método infalible que funciona independientemente del hardware o el sistema operativo. Como es un plug-and-play tardarás un segundo en volverlo a conectar cuando necesites utilizarla.
Tapa la lente. Si ves una pegatina en el marco superior de un ordenador portátil o AIO ya sabes lo que significa. Es un método simple pero muy efectivo. Si un trozo de pegatina destroza la estética de tu flamante portátil, hay soluciones dedicadas más atractivas que pueden deslizarse a voluntad, tapando o no la lente. Hay muchísima oferta en Internet muy barata.
Desactivación en BIOS. Es otra opción para portátiles o AIOs con webcams integradas que cuenten con esta opción en la BIOS. Reinicias, entras en la BIOS y desactivas una entrada que verás como “cámara web”, “cámara integrada” o “CMOS de la cámara.” La opción no es usual y solo se incluye en algunos modelos. Ten en cuenta que la mayoría de webcam integradas usan el mismo módulo en placa que el micrófono por lo que podrías dejar desactivado éste. Si quieres privacidad completa de vídeo y audio esta es una buena opción porque es improbable el acceso de un atacante, aunque se tarda más tiempo en volverla a activar porque hay que reiniciar el equipo y volver a entrar en la BIOS.
Desactivación en el sistema operativo. Puedes desactivar la webcam a nivel de sistema rápidamente en un par de pasos. En Windows, ve al Panel de Control, abre el Administrador de dispositivos-Dispositivos de imagen y simplemente pulsa en deshabilitar o directamente en eliminar. En sistemas operativos como Windows 10/Windows 8.1, también puedes deshabilitar la cámara en la herramienta de Configuración > Privacidad.
Por último, no te fíes de la luz LED de actividad. Muchas webcam incluyen una luz que se enciende cuando están en uso y de esta forma podríamos saber si se está utilizando por terceros. Sin embargo, cuidado, porque no es un método infalible.
Así lo demostraron hace años investigadores de la Universidad Johns Hopkins, que crearon una prueba de concepto con una herramienta de administración remota (RAT), capaz de reprogramar el chip de algunas cámaras. Y lo hicieron sin activar la luz de notificación dejando a los usuarios completamente desarmados.