EFF quiere que la NSA borre grabaciones telefónicas de los últimos 14 años

La Freedom Act, que fue aprobada en junio de 2015, abrió la puerta a que la NSA abandonara su programa de vigilancia masiva, a través del cual ha ido recopilando llamadas telefónicas realizadas por ciudadanos estadounideneses durante los últimos 14 años, concretamente desde la aprobación de la Patriot Act del gobierno del republicano George W. Bush.

Sin embargo para la Electronic Frontier Foundation (EFF) la aprobación de la Freedom Act no es suficiente, y pide a la NSA que destruya las grabaciones telefónicas que aún siguen guardadas en algunas bases de datos de la agencia. Pero la fundación sin ánimo de lucro no se ha quedado ahí, ya que ha recurrido a un tribunal secreto para ver cómo poder destruir dichos datos sin que se lleve por delante las evidencias de que la NSA espió a ciudadanos estadounidenses de forma indiscriminada.

Esta decisión está motivada sobre una información confirmada por el propio gobierno estadounidense, y es que tan solo unos cuantos clientes de Verizon Business pueden probar que sus llamadas han sido grabadas en alguna ocasión, mientras que el resto de la población posiblemente nunca sepa la verdad.

El gobierno estadounidense dice que no puede ser demandado por instituciones como la EFF, sin embargo la fundación está involucrada en dos casos que intentan dar solución al problema de las grabaciones de las llamadas telefónicas, las cuales considera ilegales.

Con el fin de mover hilos en ese sentido, la EFF escribió en diciembre de 2015 una carta al tribunal secreto de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA), que recientemente se ha hecho pública. En la carta explica que está preparada para discutir las opciones que permitan la destrucción de las grabaciones de forma que se pueda seguir con los casos judiciales.

Habrá que ver si la EFF consigue su objetivo de destruir las grabaciones de forma que queden pruebas sobre una actividad supuestamente ilegal por parte de la NSA, debido a la puesta en marcha del programa de vigilancia masivo.